Violencia y Caos en Ecuador: el Ejercito sale a las calles.

Ecuador se encuentra sumido en una crisis sin precedentes tras una serie de ataques violentos atribuidos a bandas de narcotraficantes, que han llevado al Gobierno a suspender las clases presenciales en todo el país hasta el 12 de enero. El Ministerio de Educación de Ecuador, acatando los Decretos Ejecutivos 110 y 111 emitidos por el presidente Daniel Noboa, anunció el cambio a la modalidad no presencial para todas las instituciones educativas.
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En un hecho alarmante, un grupo de hombres armados irrumpió en las instalaciones del canal TC Televisión en Guayaquil, tomando como rehenes a los empleados y exigiendo a través de una transmisión en vivo que la policía se retirara del lugar. Imágenes y videos difundidos muestran la intensidad de la situación, con periodistas y trabajadores del canal siendo amenazados y disparos audibles en el fondo.
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La Universidad de Guayaquil también suspendió todas sus actividades luego de que se reportaran incidentes similares en sus instalaciones. Estudiantes fueron vistos huyendo del campus en medio del pánico.

La escalada de violencia comenzó tras la fuga de Fito, líder de la banda de narcotraficantes los Choneros. En respuesta, el presidente Noboa decretó un Estado de Excepción en todo el país, que incluye un toque de queda de seis horas. Durante esta violenta jornada, vehículos fueron incendiados y policías secuestrados.

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El gobierno se enfrenta a su primera gran crisis desde la asunción de Noboa en noviembre. Con la promesa de combatir firmemente al narcotráfico, la situación actual pone a prueba su liderazgo y estrategias de seguridad.

En un video que circula en redes sociales, se observa a tres agentes policiales secuestrados, uno de los cuales lee un mensaje amenazante dirigido al presidente. Las autoridades en Guayaquil han reportado las primeras detenciones en relación con la toma del canal de televisión.

El estado de excepción, que durará 60 días, incluye a las cárceles y se implementa en un intento de restablecer el orden y la seguridad en un país que ahora vive sus "días más difíciles", según palabras del secretario de Comunicación del gobierno, Roberto Izurieta.

Esta situación crítica en Ecuador no solo representa un desafío para las autoridades locales y nacionales, sino que también ha captado la atención internacional, al tiempo que el país lucha por controlar el auge del crimen organizado y la violencia relacionada con el narcotráfico.